No estoy muy segura... pero creo que todos los días, cuando bajo del taxi al llegar a la escuela y mientras camino para llegar a mi clase, recuerdo siempre cosas. ¿Que cosas? Recuerdo los nombres, los momentos, algunas risas, las cosas que hicieron un cambio en mí.
A veces recuerdo cuando todavía caminaba tomada de la mano de mi padre, recuerdo cuando mi abuelo todavía vivía, o veces algún beso que me hizo alucinar.
Recuerdo a los amigos, a los que hace siglos que no veo, a los que verdaderamente quiero. Recuerdo paisajes, voces, miradas y algunas palabras, ilusiones de otro tiempo, sueños, miedos...
Después llego a mi clase y vuelvo al presente, pienso en la gente que ahora quiero, en los amigos que me acompañan, los pendientes que tengo para el día, el sueño que tengo...los sueños que tengo y aunque el pasado nunca se va por completo de mi mente si se calma y espera a visitarme hasta el siguiente día.
Es mi diario momento de nostalgias, para que no se me olvide lo vivido, para que no empiece de cero.
"Para que no comiences de cero"...que bonita frase contextualizada lo que hoy nos cuentas. Me gusta mucho lo que has escrito, es bueno que expresemos lo que sentimos, sea alegría tristeza y que mejor así en un diaro. De acuerdo contigo, a veces la mente es frágil y se nos olvida, a veces incluso es más frágil con los que queremos, porque como siempre sabemos que estaran ahí, no le damos ese valor. Incluso a veces es más fácil recordar lo malo que lo bueno y así sucesivamente. Me gusta mucho lo que escribes y la naturalidad con lo que cuentas, espero tú también me visites y sigamos en contacto.
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