Desolada...

Estoy sentada en un acantilado, pensando en lo de siempre, en nada, pensando en ti y queriendo que estés aquí conmigo, es tan bello y a la vez tan aterrador el ver el agua que circula con tanta rapidez hasta el fondo, que salpica las piedras y hace que parezca que hay cristales haya abajo y cuando miro al oeste, veo como a muchos metros de aquí se une con el mar… me imagino que vienes hacia acá, se que te gustaría este paisaje, pero ya no estas, has muerto y siento que muy pronto me uniré a ti, la vida se me acaba, lo se…

Estas lagrimas que caen y se pierden y se unen con el agua que hay haya abajo, en cierta manera me ayuda a relajarme, me ayuda a pensar que talvez todo esto no es posible, que estoy en un mal sueño y que nada es realidad… lo se, pronto voy a despertar.

Mientras espero que eso ocurra, me tapo los oídos, esas terribles palabras pronunciadas por tu madre vienen hacia mí… Esta muerto… la oigo decir y me duele, me lleno de miedo… no quiero oír mas esa voz, quiero oír tu voz, quiero que entiendas lo doloroso que eso fue para mi…

¡David… ven mi amor! ¡Por favor ven! – Grito con todo el poder que mis pulmones me confieren y sin más, me pongo a llorar, no se porque siempre que digo tu nombre me pongo a llorar, es terrible.

¿Qué te pasa princesa? – Alguien me pregunta mientras acaricia mi hombro desde atrás… esa voz, la reconozco…

Volteo y ahí estas tu, con tu cara tan hermosa como siempre… tu rostro refleja dolor y espanto…

No puedo articular palabra, es posible que este alucinando, si, eso debe ser, no puedes estar aquí… ¿Por qué es tan cruel mi imaginación y juega así conmigo?, me tallo los ojos para que esta alucinación desaparezca de una vez por todas…

-¿Acaso no me querías ver mi niña?, ¿No eras tu la que gritaba con tanta energía? Aquí me tienes, se que parece imposible, pero estoy aquí porque me quieres ver, estoy aquí para despedirme de ti mi vida… no talles tus ojitos, recuerda que eso no me gusta – Y mientras lo hago pones la cara de siempre, la de total desagrado cuando hacia eso.

-¡Claro que era yo quien te llamaba!- Digo con una sonrisa que apenas cabe en mi cara, es increíble poder verte- ¿Pero porque estás aquí? Esto es un sueño, ¿Estoy desmallada? ¿Acaso me llevaras contigo amor mío?

-No mi princesa, todavía no es tu tiempo –Sonríes con un aire de tristeza que es imposible ignorar- Estoy aquí porque tu me quisiste ver, porque yo me quise venir a despedir de ti y a decirte que te cuidare desde el cielo, me han admitido ahí, aunque no lo puedas creer –Y ríes con ese tono que tanto amo, que tanto me recuerda a cuando jugábamos a cuando compartíamos secretos en tantas noches que largamente hablábamos por teléfono- Yo sé que me fui precipitadamente, -continuas, ya con una cara seria- pero nadie tiene la vida comprada y esto algún día tenia que pasar. Pero ven mi amor, no llores –Y me abrazas y te siento tanto como cualquier otro día, pero mi corazón sigue destrozado y no pueden dejar de salir lágrimas de mis ojos- He decidido despedirme de ti, solo tenía una oportunidad y te elegí a ti, porque fuiste y eres la persona más importante de mi vida, lo siento pero no faltara mucho para que me vaya… Por favor, tienes que prometerme que serás feliz, que vas a vivir tu vida…

-No puedo, no puedo mi cielo, me duele imaginármela sin ti, no puedo vida mía, perdóname pero no puedo, solo he querido vivir a tu lado, con nadie mas podré estar mi amor… y te juro que nadie volverá a tener ningún derecho sobre mi, solo tu siempre estarás en mi, mi príncipe azul, por favor, no te vayas todavía, quédate solo un poco mas…

-No me voy mi vida, todo esta bien, todavía no me tengo que ir –Tomas mi cara entre tus manos y me das el mas dulce beso que jamás pude haber sentido- Cada vez que duermas, seré yo quien cobije tus sueños, seré yo la sombra que sientas toda la vida detrás de ti y siempre estaré contigo…vamos vida, no llores, siempre voy a estar contigo… y el día que tengas que partir a la otra vida, te unirás a mi… y yo vendré por ti, te lo prometo. Pero por favor, no vivas cargando esto, tienes que ser feliz… Por favor…

-Esque no puedo… ¡Esque no puedo! –Rompo a llorar y siento como el alma se me hace pedazos, como todo el dolor que es interno también ahora se manifiesta en mi cuerpo, es como si me estuvieran clavando cuchillos-

-Si que puedes…

-Amor, por favor, cada noche regálame tu olor, déjame encontrarte en las flores, en el aroma de la gente permíteme identificar el tuyo, por favor, no te alejes para siempre de mi, no te vayas completamente de este mundo…

-No lo haré…te he prometido algo y así será… ahora, perdóname, pero me tengo que marchar, recuérdame por siempre y nunca olvides lo que a mi lado viviste, trata de ser feliz… te amo…

-¡No te vayas! – Pero antes de que pudiera terminar de decir esto, ya no estabas y solo tu aroma flotaba en el aire… Y extrañamente, pude calmarme y volverme a mi casa…

Y cada noche, desde entonces, se que estas conmigo… y cada noche te siento y se que me cuidas y que nunca estaré sola… y un día, el mejor día de mi vida y también el ultimo, por fin vendrás por mi y estaremos juntos otra vez…

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Esto es algo que escribí hace mas o menos un año, pero aun ahora, me sigue gustando.

Gracias a los que me leen.